miércoles, 19 de agosto de 2009

Grandes fiascos: Alfaro Moreno


Como es Agosto, época de fichajes y de grandes expectativas, me han venido a la cabeza muchos de aquellos jugadores que parecía que eran grandes fichajes y luego fueron de chiste: Velko Iotov, Raduciou, Toril, Quique Ayucar, Fonseca, Santi Cuesta y sobre todos ellos uno especial: Alfarito Moreno.

Aun resuena en mi cabeza la canción "Aplaudan, aplaudan, no dejen de aplaudir, los goles de Alfarito no tardan en venir", ja, ja, no tardan en venir dice...

Llego de Independiente campeón y prometedor punta de la albiceleste, pero Alfarito fue la definición de argentino que ni se adapta, ni quiere, vaya paquete Dios mio.

Pues esta es la historia de Alfarito:

Delantero con muchísimos goles en primera división, campeón con un equipo grande, jugador de selección en algunas oportunidades y con casi 20 años en carrera, pero al que los pericos recordamos como uno de los blufs mas importantes de la historia.

Carlos Alejandro Alfaro Moreno apareció en Platense en 1983, en una época en que el calamar todos los años arrancaba "condenado" por el promedio, y terminaba zafando el descenso increíblemente (incluso en la temporada 1986/87 disputando un desempate con Temperley).

Rápidamente se destacó en Vicente López en un equipo que fundamentalmente era un rejunte de defensores y volantes toscos, él y Alejandro Nannini (a partir del ´85) eran los que tenían la obligación de crear una situación de riesgo y aprovecharla (a veces los ayudaba a crearlas el Chicho Julio César Gaona).Y el Beto era un tipo que solía aprovechar esas oportunidades. Rápido, encarador, oportunista, no demasiado hábil, pero tampoco un negado con la pelota, se quedó varios años en Platense, y fue figura fundamental (metió 19 goles) en el equipo que terminó 8º o 9º en 1987/88, y que ganó el Torneo Clasificación (una liguilla que jugaban los equipos que no habían clasificado a la liguilla posta, la Pre-Libertadores, y que otorgaba un lugar para la misma en la próxima temporada).

Después de eso pasó a Independiente, donde se consagró campeón en su primera temporada 88/89, siendo el goleador del equipo y una de sus grandes figuras ofensivas junto al gran Bocha y a Rubén Darío Insúa.En 1990 consiguió un logro bastante particular; Futbolistas Argentinos Agremiados organizó un Juego de las Estrellas, al estilo NBA y el Beto fue el jugador más votado por el público para integrar uno de los equipos.

En el 91 se fue a España como si fuera una figura y tras estamparse, volvió al Rojo un par de años después, pero no se quedó demasiado, jugó mucho tiempo (en 3 períodos distintos) en el Barcelona de Guayaquil, anduvo por México, volvió al país para jugar en un Ferro paupérrimo, y se retiró en el 2002 en Guayaquil.

"Un muy buen delantero, difícil para comparar con alguno de los actuales (y para marcar), porque juntaba velocidad y gol, que se destacó y fue muy querido en Independiente, pero que es y será un símbolo de Platense", esta ultima opinión es de Argentina y me da de pensar del nivel de ese fútbol, Alfarito junto a Escaich, Würz, Cuxart y el canario Andrés, es de los peores delanteros que he visto en mi vida, sin olvidar al inefable Goyo Fonseca, pero ese tiene un post para el solo otro día.